Mis silencios…

Cada uno de ellos está cargado de significados, de sentidos... Cada uno de ellos envía un mensaje, bastante confuso lo reconozco para quien no me conozca o para aquello que me conocen pero todavía no me entienden.

Cuando estoy enojada guardo silencio porque no quiero dañar con mis palabras lanzadas desde la ira, o simplemente me niego a rebajarme al nivel de insultar a otra persona (se lo merezca o no).
Cuando estoy cansada, el silencio impera porque necesito estar tranquila, recomponerme.

Cuando estoy con alguien muchas veces guardo silencio porque quiero disfrutar de esa persona, quiero disfrutar del momento. Quiero escuchar, y a veces una mirada habla más que mil palabras, tal ves es una forma de mostrar respeto a la persona con la que hablo, dejando de lado lo que soy para poder entender más a esa persona dejándole el paso abierto a que se da a conocer.

Pero ante todo cuando estoy con esa persona, mi silencio implica toda la pasión que puede brotar dentro de mí y que la expreso con mi silencio, poniendo mis otros sentidos en acción para demostrarle que dentro de mí hay un caos por su causa.

Escucho porque quiero aprender, aprender aún más a valorar a esa persona, aprender cómo es y lo que necesita, aprender cómo funciona su mente, cómo mueve su boca, cómo mueve sus ojos, sus manos, y saber cuando debo terminar con el silencio y tener las palabras justas para decir.
Mi silencio entonces se convierte en una expresión sublime de amor.. y si hablo mis palabras sonarían rompiendo un silencio, un instante, un momento que tal ves nunca más se repita, retengo recuerdos tan solo escuchando y dejándome llevar más no con palabras sino con expresiones.

Comments

Popular posts from this blog