
Tretas del destino Hoy amanecí irreal, no encuentro un camino para seguir; recorro y recorro pero no encuentro el final, acaso no aprendí la lección. ¿Acaso sigo aquel camino que tiene un abismo que hace imposible el poder llegar a ti? Tal vez al final no aprendí, y quiero volver, sigo queriendo llegar a ti, pero me di cuenta ya de la falsedad, pero la costumbre me puede más. Si no soy capaz de romperla, entonces ¿qué hago aquí? ¿De qué soy capaz? El poder cambiar en cierto modo es un acto de sobrevivencia, no es el día, ni el momento, ni las palabras dichas. ¿Acaso busco la verdad por todos lados sin tener éxito al encontrarla? Tal vez busco un color pero la verdad absoluta no tiene ningún color en especial, ¿Entonces como busco? Si es negro decimos que es malévolo, si es blanco que es puro, pero… ¿A la verdad que color la identifica? ¿Acaso la verdad absoluta existe? Mentiras tan ciertas como ellas para convencerme de lo que pienso que soy, no un ser más, pero un ser más...